con un perro San Bernardo llamado Chocolatoski. Éste podía hablar y
sólo le gustaba comer trufas, pastel de chocolateHabía una vez un niño llamado Tobi que deseaba tener un perro, pero los padres
no estaban de acuerdo; ya que el departamento donde vivían era muy estrecho.
El día del cumpleaños de Tobi su mamá le organizó una reunión en su casa.
Pasaron los días y Toby decidió ir a pasear un rato y al salir de su casa se
y algunas galletas. El niño se
hizo amigo de este perro; por lo que decidió llevarlo a la casa, al llegar la mamá
se quedó sorprendida de lo grande que era el animal.
El perro se quedó algunas noches hasta que el papá llegara de viaje. La mamá al
principio pensaba que era imposible que un perro así se pueda quedar en un
apartamento tan chiquito como el suyo; pero para su sorpresa el papá decidió que
se podía quedar y Tobi fue feliz con su perro.
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